Se trata de una iniciativa que lleva más de 13 años de historia, donde todas las temporadas estivales se enriquece la conexión con la comunidad, fomentando el aprendizaje en niños y niñas de la zona lacustre. El suceso ocurrió en la Biblioteca Municipal Mariano Latorre de Pucón.

Fueron 120 niños los que participaron en esta ocasión y celebraron, junto a sus padres, el cierre de este exitoso proyecto. Este último funciona gracias al apoyo del Municipio y al Ministerio de Desarrollo Social, y que permite  continuar con sus jornadas laborales a las familias que trabajan durante la estación. En total, asistieron cerca de 350 personas.

Eduardo Pino, coordinador de la Escuela de Verano hace cinco años, recalcó en lo esencial de “contar con este tipo de talleres artísticos, culturales y creativos para que los menores puedan desarrollar sus aptitudes, en el contexto de los programas que desarrolla el Municipio”.

Así, como cada año, se desarrollaron una serie de talleres como la confección de títeres, clases de lectoescritura y escritura creativa. A dicha lista se incluye una serie de cursos que fomentaron, durante la época estival, acercar a los niños y niñas al mundo de la lectura y el relato oral.

“En Pucón tiene mucha relevancia y genera mucho entusiasmo aquellas actividades donde se fomente el aprendizaje de los hijos, por lo mismo la recepción fue increíble”, declaró Sita Villalobos, locutora y funcionaria de la Biblioteca Municipal.

Lo anterior corresponde al objetivo de esta iniciativa que, cabe mencionar, cerró con la fantasía y el pensamiento mágico que caracteriza a los más pequeños, ya que sus presentadores fueron dos muñecos llamados Rogelio y Feliciano.